En un giro que no sorprende del todo a los fanáticos de los videojuegos, Sony ha anunciado una nueva subida en el precio de sus consolas en Estados Unidos.
La compañía atribuye el ajuste a un entorno de mercado “desafiante”, influido por los recientes aranceles globales, pero la noticia ha generado reacciones encontradas entre los jugadores.
A pesar de estas subidas, la PlayStation sigue brillando en ventas. La PS5 se mantiene como una de las consolas más exitosas de la historia reciente, superando ampliamente a su principal competidor en esta generación y alcanzando cifras de récord en todo el mundo.
Para los gamers, esto significa que hacerse con la consola de sus sueños podría costar un poquito más, pero la experiencia de juego y el catálogo de títulos siguen siendo tan atractivos como siempre. Sony continúa apostando fuerte por la marca PlayStation, demostrando que, incluso en medio de subidas de precio, la pasión por jugar no disminuye.