El juicio antimonopolio contra Google en Estados Unidos dejó una decisión clave: la compañía no tendrá que desprenderse de Chrome ni de Android, algo que muchos veían como un posible terremoto en el mundo tecnológico.
El juez Amit Mehta consideró que quitar estos gigantes de la compañía sería demasiado extremo y podría desestabilizar todo el sector. Sin embargo, Google no sale completamente libre: ahora deberá limitar sus contratos exclusivos y compartir ciertos datos de búsqueda con rivales, para darles más oportunidades de competir.
Eso sí, los acuerdos con gigantes como Apple para seguir siendo el buscador predeterminado siguen vigentes, lo que tranquilizó a la compañía y también a Wall Street: las acciones de Alphabet subieron más de un 7% tras la noticia.
Read our statement on today’s decision in the case involving Google Search:
Earlier today a U.S. court overseeing the Department of Justice’s lawsuit over how we distribute Search issued a decision on next steps.
Today’s decision recognizes how much the industry has changed…
— News from Google (@NewsFromGoogle) September 2, 2025
Por otro lado, asociaciones defensoras de una regulación más estricta critican la decisión y aseguran que las medidas son “tibias” frente al dominio de Google en el mercado de búsquedas.
Y ojo: aunque Google ganó esta batalla, el proceso aún no termina. El Departamento de Justicia podría apelar, y la compañía sigue enfrentando investigaciones por su negocio publicitario, donde las decisiones podrían ser más severas.
En resumen: Google celebra, los competidores ganan un poco más de terreno, y los reguladores no bajan la guardia. ¡La batalla tecnológica sigue!