Han pasado 30 años, pero Wonderwall sigue sonando como si fuera ayer. El clásico de Oasis alcanzó el segundo lugar en Reino Unido, dominó durante diez semanas el ranking Modern Rock Tracks en EE. UU. y encabezó listas en Australia, Nueva Zelanda y España, vendiendo más de 1,8 millones de copias solo en el Reino Unido.
Detrás de su letra, muchos pensaban que Noel Gallagher la escribió para su entonces pareja, Meg Mathews, pero la verdad es más curiosa: estaba inspirada en “un amigo imaginario que algún día vendrá y me salvará de mí mismo”.
Esa combinación de vulnerabilidad y esperanza, sumada a la interpretación de Liam Gallagher, convirtió la canción en un himno generacional que aún hoy emociona.
Curiosamente, Noel había planeado cantarla él mismo, pero terminó cediéndole el protagonismo a su hermano y se quedó con otro clásico: Don’t Look Back in Anger. Y vaya que fue la decisión correcta: Wonderwall se convirtió en un ícono del Britpop que atraviesa décadas sin perder su magia.
Incluso en 2021, Rolling Stone la incluyó en el puesto 95 de las 500 mejores canciones de todos los tiempos, reconociendo su capacidad de trascender modas y generaciones. Con su melodía acústica simple y su carga emocional, sigue recordándonos por qué Oasis es sinónimo de eternidad musical.