Un operativo encubierto de más de 24 horas culminó con un fuerte golpe a la estructura de la Mara Salvatrucha en la colonia 4 de Febrero, zona 7 capitalina.
La Policía Nacional Civil (PNC), a través de su división antipandillas DIPANDA, capturó a tres presuntos integrantes de la estructura y remitió a una adolescente, en posesión de armas de grueso calibre y droga.
El despliegue policial, acompañado por fiscales del Ministerio Público, permitió identificar movimientos sospechosos de varias personas vinculadas a la pandilla.
Entre ellas, Julyssa Janeth López Somoza, de 20 años, y una menor de 17, quienes fueron interceptadas cuando intentaban escapar con un costal y una mochila. Dentro, las autoridades encontraron un fusil con municiones, dos subametralladoras —modelos UZI e Intratech—, varios cargadores y más de 50 cartuchos listos para ser usados.
También se hallaron seis placas de circulación vehicular, presumiblemente destinadas para encubrir autos en hechos ilícitos.
Mientras tanto, en un allanamiento paralelo, Guillermo Leónidas Hernández González, alias “Joker”, de 18 años, y Joshebett Dolores Gabriela Castro, de 34, fueron capturados en una vivienda del mismo sector.
En el lugar, la policía localizó una pistola, una báscula digital, 40 bolsas con marihuana, cocaína fraccionada en tres recipientes y dos teléfonos celulares.
Los investigadores aseguran que este operativo logró frustrar posibles ataques armados que estaban siendo organizados por la pandilla.
Las armas incautadas no eran de uso común: estaban preparadas para causar alto impacto, lo que evidencia un nivel de planificación alarmante.
Este no es un hecho aislado. Según la PNC, solo en lo que va del año se han remitido a más de 300 menores por delitos como portación ilegal de armas, extorsión y asesinato.
El último caso ocurrió este lunes, cuando un adolescente fue sorprendido con un arma oculta en su mochila en Siquinalá, Escuintla.