Durante la entrevista con La Red 106.1, Arévalo se refirió a lo que ha denominado como «golpismo enquistado» en Guatemala, explicando que el país tiene «una serie de redes de corrupción, redes político-criminales, donde han venido integradas distintas personas que pertenecen a distintos espacios, desde espacios criminales hasta funcionarios públicos».
El presidente detalló que estas redes operan para garantizar impunidad, penetrando el aparato de justicia y controlando «procesos de formulación de ley, de selección de magistrados, etc.». Mencionó la existencia de «partidos que han sido declarados narcopartidos oficialmente, por ejemplo, por el gobierno de los Estados Unidos», que, según explicó, eran organizaciones formadas por grupos criminales para acceder a posiciones de poder a nivel local y legislativo.
Arévalo citó el último reporte de la relatora de Naciones Unidas sobre independencia judicial, que, según indicó, «califica la situación de criminalización de operadores de justicia, defensores y periodistas en el país como terrible». Según el presidente, estas redes operan principalmente «dentro del aparato de justicia y dentro del aparato político».