The Weeknd ha lanzado el videoclip de su más reciente sencillo, «Dancing in the Flames», y lo que más ha llamado la atención es que el video ha sido filmado completamente con un iPhone 16 Pro, marcando un hito en la producción audiovisual de alta calidad realizada con un smartphone.
Detalles técnicos y colaboración con Apple
Durante una reciente presentación de Apple, la compañía destacó que los músicos de The Weeknd habían utilizado el nuevo iPhone 16 Pro para rodar su último videoclip.
Esta semana, el esperado video fue lanzado oficialmente, mostrando lo que los avances tecnológicos del dispositivo pueden ofrecer en términos de calidad visual.
El videoclip fue filmado en resolución 4K a 120 cuadros por segundo (FPS), una capacidad exclusiva del iPhone 16 Pro y su versión Max.
La calidad de las imágenes ha impresionado tanto a críticos como a fanáticos, destacando la nitidez y belleza visual del trabajo, lo que subraya cómo este tipo de dispositivos están reduciendo la distancia entre las cámaras de consumo masivo y el equipo profesional.
Un equipo de producción destacado
El videoclip fue dirigido por Anton Tammi, conocido por su estilo visual innovador, y la cinematografía estuvo a cargo de Erik Henriksson.
Ambos profesionales señalaron que la experiencia de trabajar con el iPhone 16 Pro fue reveladora.
«El iPhone 16 Pro está empezando a difuminar la línea entre las cámaras regulares y las profesionales», afirmaron, subrayando la versatilidad y las posibilidades creativas que el smartphone ofrece.
Con este lanzamiento, The Weeknd y Apple no solo han demostrado el poder de la tecnología móvil en la industria del entretenimiento, sino que también han marcado un nuevo estándar para la producción audiovisual, abriendo el camino a futuras colaboraciones entre la música y la tecnología.
Innovación en el mundo de los videoclips
«Dancing in the Flames» no solo es un nuevo éxito musical para The Weeknd, sino también una muestra del impacto de la tecnología en la creación de contenido visual de alta calidad.
El videoclip, con su estética cuidada y sorprendente resolución, es un testimonio de cómo el iPhone 16 Pro está transformando la forma en que se producen los videoclips en la era digital.