La creadora de contenido guatemalteca Florecita Cobián hizo pública una denuncia en redes sociales en la que afirma que su hija fue víctima de abuso y que el proceso judicial contra el presunto agresor, identificado como su padre, el cantante Pedro Cuevas, fue desestimado recientemente por un juzgado de Femicidio de Chimaltenango.
En un video difundido el 26 de noviembre, Cobián relató entre lágrimas que el caso —que se ha extendido por más de cinco años— fue cerrado durante una audiencia que, según dijo, terminó sin avanzar debido a supuestos “tecnicismos” legales.
La madre señaló que esta decisión ha incrementado su temor por la integridad de la menor.
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Cobián aseguró que, durante todo este tiempo, ha tratado de resguardar la identidad de su hija; sin embargo, decidió revelar la relación de la menor con el caso para solicitar apoyo público.
Según explicó, su silencio permitió que el proceso avanzara con lentitud mientras, a su criterio, se daban inconsistencias y decisiones judiciales que favorecían al acusado.
En mayo de 2025, Cuevas fue ligado a proceso por el delito de abuso sexual en contra de una niña. En ese momento, la identidad de la víctima no fue revelada por razones de protección. Ahora, Cobián confirmó que se trataba de su hija, y señaló que la desestimación de la audiencia más reciente la deja en un escenario de incertidumbre.
“Temo por mi hija, por su seguridad y por lo que pueda suceder si este caso queda en el olvido”, manifestó en su declaración pública, donde cuestionó el funcionamiento del sistema de justicia y denunció presuntos actos de corrupción en el desarrollo del expediente.
Hasta el momento, no se ha informado oficialmente cuál será el siguiente paso procesal ni si la Fiscalía recurrirá la resolución del juzgado.
El caso continúa generando reacciones en redes sociales, mientras colectivos y usuarios expresan solidaridad con la denunciante y solicitan claridad sobre la actuación de las autoridades.